Estadios de las ULCERAS por PRESION (GM aux. de enfermería)

El alumnado del Ciclo Formativo de Grado Medio de Técnico de Auxiliar de Enfermería ha llevado a cabo un proyecto educativo que combina aprendizaje práctico y teórico. En un esfuerzo por comprender y visualizar mejor una de las complicaciones más comunes en la atención a personas con movilidad reducida, los estudiantes han creado maquetas que representan los distintos estadios de úlceras por presión.

Las úlceras por presión, también conocidas como lesiones por presión o escaras, son daños en la piel y tejidos subyacentes que ocurren debido a la presión prolongada sobre áreas específicas del cuerpo. Estas úlceras suelen desarrollarse en personas que tienen movilidad limitada o que permanecen en la misma posición durante períodos prolongados, como en enfermos encamados o personas con discapacidades.

El trabajo comenzó con una investigación sobre la patología, donde los alumnos exploraron la anatomía de la piel, los factores de riesgo y las técnicas adecuadas para la prevención y el tratamiento de estas lesiones. A través de esta investigación, los estudiantes comprendieron la importancia de una atención adecuada, destacando el papel esencial que desempeñan en la calidad de vida de los pacientes.


Las Causas comunes son: Presión continua: La presión sobre la piel interfiere con el flujo sanguíneo, lo que puede llevar a la muerte celular. Fricción: El roce de la piel contra superficies duras puede desgastar la piel. Humedad: La exposición a humedad (como sudor o incontinencia) puede debilitar la piel y aumentar el riesgo de lesiones.

Áreas más afectadas: Las úlceras por presión suelen aparecer en: Talones, caderas, nalgas, espalda y áreas de prominencias óseas.

Clasificación: Se clasifican en diferentes grados según la profundidad y el daño al tejido:

Grado I: Enrojecimiento de la piel que no se blanquea al presionarla.

Grado II: Pérdida parcial del grosor de la piel, que puede presentarse como una ampolla.

Grado III: Pérdida total del grosor de la piel, con daño o necrosis del tejido subcutáneo.

Grado IV: Daño extenso, con afectación de músculos, huesos o estructuras adyacentes.


Prevención: Movilización frecuente: Cambiar de posición regularmente para aliviar la presión. Uso de dispositivos especiales: Cojines y colchones diseñados para distribuir la presión. Cuidado de la piel: Mantener la piel limpia y seca para evitar irritaciones.

Tratamiento: El manejo de las úlceras por presión incluye, Limpieza de la herida, control del dolor y en casos severos, puede ser necesaria la cirugía.

La prevención y el tratamiento temprano son clave para evitar complicaciones y promover la recuperación.


Finalmente, el proyecto culminó con una exposición en la que los estudiantes presentaron sus maquetas ante sus compañeros y profesores. Durante la exposición, cada grupo explicó su proceso de creación, los conocimientos adquiridos y la relevancia de entender y prevenir las úlceras por presión en el ámbito de la atención sanitaria. La presentación no solo permitió a los estudiantes consolidar sus aprendizajes, sino que también generó un espacio de reflexión sobre la importancia de la empatía y el cuidado en el ejercicio de su futura profesión.